El hotel se esmera especialmente en el servicio de desayuno, que siempre ha sido el orgullo de nuestro Hotel, reconociendo la importancia de un momento de tranquilidad antes de una intensa jornada de trabajo o de visitas turísticas.
En la Sala Desayuno te acoge una música de fondo que te acompaña y te invita a saborear el placer de un desayuno americano, valorando la selección especial de sabores auténticos de la tradición italiana y de las mejores materias primas: desde el rincón de la fruta fresca, con yogur, cereales y tartas caseras hasta los platos calientes del día, del bacon crujiente a los huevos revueltos, las salchichas locales, las verduras mixtas, el pan reciente y una amplia selección de embutidos y quesos de Denominación de Origen Controlada, con un guiño a los productos del campo romano.
De 7 a 10.30, y los sábados y domingos hasta las 11, empieza tu día en Roma de la mejor manera posible, con la calidad y el sabor de un desayuno rico e invitante.